lunes, 13 de junio de 2016

Causalidad / casualidad

Estaba en la biblio preparándome el último examen ordinario importante que tengo este viernes y hoy toca uno de esos días desmotivadores, en parte por cansancio y la frustración de estudiar y no conseguir ningún resultado... pero bueno, dicen que la uni es así, que de aquí se sale, aunque sea en 2 añitos más de los que dure la titulación que estés cursando (espero que sea sólo 1 más y con par de asignaturas.. por dios).

El caso es que estaba con el ordena entre canción y canción de mi lista triste de spoty, con las típicas canciones de pelis disney que te dan morriña (lo mejor que se me podía ocurrir) y cruzarme con una foto donde hay acumulados muchos recuerdos ha hecho el resto. Ahí he decidido que era uno de esos días en los que sólo me apetece comer chocolate, pero como no tengo he ido a por un café, me lo he hecho y me he venido a vaguear a la habita para seguir recordando (clara prueba de que lo peor que puedo hacer es quedarme estudiando en la resi si no hay presión, así lo escribo y cuando lo relea a ver si me entra en la cabeza).

Sé perfectamente que lo mío nunca ha sido expresarme, y de hecho no suelo ser así, pero estoy en esos días sensibles y necesitaba desahogarme, algo ha hecho que este tecleando esto ahora, como ya he dicho últimamente me da por ello y sé que si no lo hago no voy a poder seguir estudiando hoy, así que es algo más personal... 

Toda esta sensación viene en parte a que se acaba el curso y anoche me puse a apreciar todo lo que había ganado y perdido con él, como había cambiado todo en 9 meses. No me arrepiento para nada de estos cambios, que me han traído muchos momentos buenos pero también muuuchas lloreras, pero bueno, suma de experiencias supongo, tengo 18 años y no estoy dispuesta a arrepentirme de nada, ya habrá tiempo de ello, así que así me he tomado estos meses.... he hecho miles de cosas de las cuales hace un año me ponen un vídeo haciéndolo y hubiera puesto la mano en el fuego de que esa persona no era yo, lo juro.

Y es que lo mejor, de verdad, lo mejor que me podía haber pasado es acabar aquí en Valladolid, aún recuerdo la llorera del día que salieron los resultados de PAU en Castilla-la-Mancha, eran sobre las 4 y media o 5 de la tarde, acababa de terminar de comer y dijeron por el grupo de wpp de clase que ya habían salido, el servidor estaba cargadísimo y ahí nadie podía ver nada (fijaos que corrigieron en 2 días, así que con la mala suerte que tengo nada bueno podía salir de ahí).

El resultado fue desastroso, estaba sola en casa y me tiré como hora y media llorando en la cama de mis padres, además ese día era la fiesta del cole y no fui, con la ilusión que me hacía... menos mal que tuve una persona al lado que me ayudó mucho en ese momento. Mi principal frustración era no llegar a alcanzar la nota que pedían en Madrid, era como mi futuro ideal para el año siguiente, todo el mundo iba allí y desde una ciudad tan peque como Toledo parecía como lo mejor para la carrera, pero ya os digo yo que no... lo que pasa es que tenía la cabeza en las nubes, de paleta total (un poco más que ahora jejeje) y veía Madrid como `la gran ciudad´, sólo pensaba en lo bien que me lo iba a pasar allí.

Estaba cabreada por que veía que me quedaba en casa haciendo una carrera que no me gustaba y todo el mundo de alguna manera u otra había tenido lo que esperaba, en ese momento no podía dejar de ser egoísta y preguntarme por que justo yo tenía que ser la que no lo había conseguido. La verdad es que el verano a parte de las vacaciones y demás no fue de los mejores ya que septiembre lo veía muy negro.

Reclamé nota de 4 asignaturas y en la mayoría me bajaron, así que por decirlo de alguna manera ya me la sudaba. Empecé a echar como loca carreras en unis Madrid, para que os hagáis una idea: Ingeniería marítima o algo así de aeropuertos pero relacionado con las letras... no se que narices iba a pintar yo haciendo eso de verdad,  pero en fin... luego llegaron las mitiquísimas vacaciones del verano de 2º de bach (ya os podéis imaginar) y allí conocimos a unos chicos de Valladolid (justo) que me hablaron de que aquí había la carrera que yo quería hacer en Madrid y que mi nota estaba por encima de la de corte, la verdad es que en se momento no me lo plantee ya que Valladolid no era Madrid.

Cuando llegué a casa pensé: Marina, no seas tonta, haz lo que te gusta. Mi principal miedo era irme lejos de casa, ya que nunca me había cambiado de colegio, ni me había hecho falta hacer nuevos amigos y con lo mía y tímida que yo era... si me cogían en algún otro sitio todo esto iba a ser muy diferente, pero bueno, eché matrícula en Zaragoza y Valladolid. Mi sorpresa vino cuando salieron las listas de admitidos en ambas, yo no estaba en ellas, la nota de corte había subido muchísimo, así que yo, que ya estaba animada a irme lejos me deprimí de nuevo. Menos mal que la sabía de mi madre me obligó a echar matrícula en Ingeniería Electrónica en Toledo, si no hubiera empezado el año de nini, aunque otra opción era volver a repetir PAU, cosa que descarté semana antes cuando no había hecho nada.

Empecé el 1 de Septiembre a estudiar en Toledo y no estuvo tan mal como esperaba; me refiero al ambiente, lo mítico de: no os quedéis en casa cuando empecéis la uni, pero a mi me gustó, aunque para que engañarnos, si podéis, iros fuera, pero que sepáis que quedarse tampoco es una tortura.

Yo seguía allí pero estaba pendiente de la página de la Universidad de Valladolid prácticamente las 24 horas del día, ya que era el sitio donde tenía más posibilidades. Salió la 2º lista de admitidos yyyy que raro, Marina tampoco estaba en ella, pero me quedé justita para entrar en la 3º, así que con toda la ilusión del mundo empezamos a ver resis, transporte hasta aquí etc... increíble también que no entrase en esta, si admitieron a 20 personas yo estaba en el número 21. Ahora me entendéis cuando digo mala suerte. 

Pero al fin, entré en la 4º, vinimos corriendo a Valladolid prácticamente ya con las maletas hechas y me quedé aquí como ya he contado alguna vez.

Por eso cuando ahora hecho la vista atrás y veo todas esas pequeñas cosas que me me han hecho acabar aquí y lo mal que lo he pasado por ello me sorprende, creo que es mezcla de casualidad y causalidad.. Bendito corrector de PAU que me puso una nota un poco injusta y también el que luego me la bajó más. Por qué elegir Gandía para irnos de vacaciones y coincidir en el mismo edificio con los chicos que me hablarían de Valladolid o por que no entrar en la 2º lista y haber podido venir más tranquilamente a ver resis y no quedarme prácticamente en la primera que ví.

Gracias a todo esto he tenido un año increíble, he conocido a personas geniales, que creo que estarán a mi lado mucho tiempo y he descubierto partes de mi misma que no conocía. Vivir lejos de casa aunque esté en palmitas aquí, me ha hecho hacerme más adulta e independiente claro. Y aunque me queje ahora por los exámenes, no tiene para nada compensación con el añazo que he vivido, merece la pena.

Si hablo del lado negativo de todo esto, alejarte de casa y de las personas con las que tratabas hasta ese momento te hace darte cuenta de lo que te aportan realmente, y te hace ver quién sigue ahí y hace que formes parte de su vida aunque ya no estés en su rutina. Por naturaleza la vida avanza y siempre toca decir adiós a momentos o personas, pero eso no es malo, siempre hay que quedarse con los buenos recuerdos, si las cosas llegan así es por que deben ser así, esa es mi opinión. Hay que ser valientes para avanzar en este aspecto.

Espero que mi enrolle con la experiencia en PAU le pueda servir a alguien que me lea que este en la misma situación que estuve yo. De verdad que en el momento es super frustrante pero no es el fin del mundo, ahora lo veo y pienso: tonta de mí... por otro lado, decir que uno de mis miedos, era no poder disfrutar la vida universitaria a la hora de salir de fiesta; Madrid es grande y hay más ambiente que en otros sitios, pero ya os puedo confirmar que no, no son las veces que salgas o la cantidad de sitios que haya , son las personas con las que compartes esos momentos las que te hacen pasártelo genial, no por ser una ciudad más pequeña es peor (sí, yo opinaba eso). 

Ahí veo como he cambiado de mentalidad este año, por eso y sin extenderme más de lo que lo he hecho decir a los que me leáis que disfrutéis desde el primer momento de las nuevas etapas. Ojalá volver a Septiembre y volver repetir el curso entero.